Generación joven
En primer lugar, una participación significativa de los jóvenes en el proceso de toma de decisiones a todos los niveles, aportando sus ideas y promoviendo agendas de desarrollo, permitirá a los jóvenes dar voz a los problemas que les afectan. Asumiendo un papel activo en la ejecución y el seguimiento de las intervenciones de desarrollo, los jóvenes se asegurarán también de que esas intervenciones resuelven realmente los problemas sobre el terreno.
Los jóvenes también tienen que utilizar sus habilidades obtenidas a través de la educación formal o en las comunidades para contribuir al desarrollo de Malawi trabajando en grupos juveniles o en pequeñas y medianas empresas. En un país que depende en gran medida de la agricultura, se necesitan innovaciones como inventarios básicos de maquinaria. Podrían aumentar la producción de alimentos para garantizar la seguridad alimentaria, y el excedente podría utilizarse para la agroindustria y la transformación de productos agrícolas que también podrían venderse en los mercados internacionales.
Abogar por cambios políticos también puede ayudar a construir sistemas de desarrollo post-pandémicos más fuertes para recuperarse de los choques actuales y prepararse para el futuro, evitando los problemas a los que se enfrentaron en 2020. Los jóvenes pueden utilizar diversas plataformas, incluidas las redes sociales, para abogar por que todos los servicios públicos esenciales estén adecuadamente financiados y tengan en cuenta las cuestiones de género a la hora de abordar las necesidades de los pobres y vulnerables. Esto permitirá la igualdad en el acceso a servicios de calidad y asequibles, como los hospitales, ya que el personal estará bien equipado. Esto también podría ayudar a las mujeres, que tienden a ocupar puestos de primera línea y mal pagados, a conseguir empleos decentes y seguir la carrera de sus sueños.
¿Cómo pueden prepararse los jóvenes para el futuro?
Cuatro competencias clave para los jóvenes del siglo XXI
Habilidades cognitivas avanzadas (como el pensamiento crítico y la resolución de problemas) Habilidades relacionadas con la función ejecutiva (como la autorregulación y la metacognición) Habilidades socioemocionales (como la autoestima, la adaptabilidad, la creatividad, la perseverancia y la empatía).
¿Cuál es el papel de la juventud en la configuración de nuestro futuro?
Los jóvenes no sólo representamos el futuro de nuestro país, sino que somos uno de los principales agentes de cambio y progreso de la sociedad. También tenemos un gran efecto en el desarrollo económico. En esta etapa de nuestras vidas, establecemos muchas relaciones sociales y desarrollamos una personalidad que nos define como nueva generación.
¿Qué pueden hacer los jóvenes para cambiar el futuro de su país?
Pero para ello hay que educarlos para mejorar nuestro país. Pueden hacer brillar nuestro futuro con sus últimas ideas y tecnologías. Pueden hacer que la gente vea el mundo con otros ojos. Ellos son los que pueden cambiar la mentalidad de la gente.Así que se puede decir que” La juventud puede cambiar el futuro de nuestro país”.
Ser joven hoy
Esta es una pregunta que me hacen los jóvenes hoy en día. Los jóvenes quieren cambiar el mundo, suelen ser conscientes de los problemas relevantes que les afectan a ellos y al mundo, pero se preguntan cómo abordarlos.
Los jóvenes son intrépidos, valientes, impetuosos, dinámicos y seguros de sí mismos. Los jóvenes tienen las ideas, la creatividad y una gran energía para dar forma a un mundo mejor. Los jóvenes están llenos de esperanza y, a través de la innovación y la imaginación, son solucionadores de problemas y tienen un gran potencial para generar un cambio social positivo en el mundo.
Los jóvenes están en una continua búsqueda de la trascendencia que genera el deseo de ayudar al medio ambiente, a los países, a las comunidades y a las familias. Con la globalización y la tecnología el mundo se ha hecho aún más pequeño, con posibilidades ilimitadas de conexión, existe una oportunidad única para que los jóvenes se unan en solidaridad y empaticen en amistad real.
Para celebrar la juventud y todas sus características, Naciones Unidas declaró en 1985 el primer “Año Internacional de la Juventud”. Ese mismo año, jóvenes de todo el mundo se reunieron en Roma. Durante aquel encuentro, convocado por el Papa Jonh Pablo II, se anunció la institución de la Jornada Mundial de la Juventud como un acontecimiento internacional de una semana de duración, cada dos o tres años. Desde entonces, algunos de los países en los que se ha celebrado la Jornada Mundial de la Juventud son Italia, Canadá, Alemania, Australia y España. Este año, la Jornada Mundial de la Juventud se celebrará en la increíble y animada ciudad de Río de Janeiro, Brasil.
La generación actual
En el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), estamos implementando una hoja de ruta para preparar a educadores y estudiantes para los desafíos de hoy y las oportunidades del futuro. Como parte de la Iniciativa de Habilidades para el Siglo XXI del BID, estamos ayudando a los países a transformar sus sistemas educativos trabajando junto a las partes interesadas de los sectores público, privado y de la sociedad civil.
La Iniciativa de Habilidades del Siglo XXI cuenta con programas y productos de conocimiento en seis áreas clave: arte, ciudadanía, habilidades digitales, ciencias del comportamiento, deportes y mindfulness, que tienen como objetivo el desarrollo de habilidades transversales. Creemos en la educación permanente, que integra tanto la educación formal como la no formal, para proporcionar experiencias de aprendizaje flexibles y personalizadas.
Las competencias transversales permiten a los jóvenes reinventarse a lo largo de todas las etapas de la vida, adaptarse a circunstancias cambiantes y diversas e identificar oportunidades de crecimiento en medio de las diferencias. Entre ellas, las competencias del siglo XXI, o competencias transversales que las personas necesitan en el siglo XXI, incluyen:
Ensayo sobre la juventud de hoy
Este artículo forma parte de la serie de la Red del Foro sobre Digitalización. Pero esto no es todo: dondequiera que estés, conviértete en miembro de la comunidad mundial de la Red del Foro para comentar a continuación y continuar la conversación.
En un estudio que acaban de publicar la OCDE y WorldSkills, con aportaciones de Educación y Empresarios, se preguntó a los jóvenes por su grado de conocimiento de los cambios que afectan al nuevo mundo laboral y por su confianza en su capacidad para afrontarlos. Los resultados no pintan un panorama halagüeño para nuestros sistemas de aprendizaje y, aunque conocemos grandes ejemplos de jóvenes a los que se dan las oportunidades adecuadas, tenemos que encontrar la manera de ampliar estas historias de éxito para construir un mundo laboral más inclusivo.
A pesar de ciertas inquietudes en torno al futuro del trabajo, los jóvenes expresaron que son conscientes de los retos que se avecinan, especialmente en lo que respecta a la tecnología. Casi el 56% de los jóvenes se siente optimista respecto a que la tecnología contribuirá a generar nuevos puestos de trabajo. Sin embargo, este optimismo no debe eclipsar el temor que expresaron sobre el impacto de la tecnología en el mundo laboral y en sus propias perspectivas profesionales. Alrededor del 47% de los jóvenes teme no tener acceso a empleos fijos a tiempo completo debido a la digitalización.