Al que madruga Dios le ayuda, pero el segundo ratón se lleva el queso
En el extremo opuesto, cómo se dice cuando “el que llega por primera vez siempre recibe el primer golpe”. Me refiero a cuando, por ejemplo, el gobierno introduce por primera vez un nuevo formato de pasaporte en lugar del convencional. Los que están a punto de renovar su pasaporte serán los más afectados, ya que se enfrentarán a las consecuencias inmediatas de estos cambios, como la inmigración en el aeropuerto o los problemas de visado para visitar un nuevo país.
Yo eliminaría cualquier referencia a los “madrugadores”. Un madrugador suele tener connotaciones positivas, significa alguien que se levanta al amanecer, una persona que se levanta antes que la mayoría de la gente. En EE.UU., algunos restaurantes ofrecen descuentos en las cenas para madrugadores, una comida que se sirve antes del horario tradicional de la cena.
No creo que haya un modismo común con el significado que busca el PO, al menos, no se me ocurre ninguno. Pero para ser absolutamente claro, no se llama madrugadores a los primeros afectados por una nueva sanción o normativa.
A quien madruga Dios le ayuda
¿Sabes que a quien madruga y al segundo ratón se les puede aplicar un modismo, más concretamente un modismo de broma? En la literatura, “al que madruga Dios le ayuda” y “al segundo ratón le ayuda” son dos frases hechas con significados afines (pero no iguales).
El refrán “Al que madruga Dios le ayuda” significa que si empiezas algo pronto, tus posibilidades de éxito son mayores. Mientras que “El segundo ratón se lleva el queso” significa que el primer ratón queda atrapado y el que viene detrás se aprovecha de ello y muerde el anzuelo (el queso).
Explicando con el significado literal – Si un tarro abierto está relleno de gusanos guardados en una zona abierta, el que llegue primero tendrá la oportunidad de comer más gusanos. Por otro lado, se atrapa a un ratón en busca de queso con dos ratones merodeando fuera. El primer ratón entra en la trampa y muere. El segundo ratón se salvará y podrá tener el cebo – queso – guardado en la trampa.
Por ejemplo: si se distribuyen entradas limitadas a las 11′ para un concierto, y Juan llega al mostrador antes que nadie. Las posibilidades de que consiga una entrada son mayores. Entonces, puede decir:
A quien madruga Dios le ayuda
Sí, tienes razón. “El pájaro madrugador” expresa la idea de una clase particular de pájaros que siempre se lleva el gusano. Por supuesto, “el gusano” expresa la idea de una clase particular de “gusanos” que siempre se comen los pájaros tempranos.
La idea general es que los gusanos se encuentran en la superficie al amanecer, pero viven bajo tierra durante el día, por lo que para poder atrapar uno, un pájaro tiene que estar levantado temprano. El proverbio se refiere al comportamiento general, no a la competencia por un recurso concreto.
Pero si se puede sustituir por “Los pájaros madrugadores atrapan gusanos”, entonces no hay ninguna implicación de competencia o de recursos limitados, sólo significa que los pájaros “tardíos” no consiguen gusanos porque han vuelto a bajar bajo tierra, no porque se los hayan comido los pájaros madrugadores, que es lo que parece implicar el proverbio:
Decir “atrapa su gusano” es gramaticalmente correcto. Sin embargo, creo que sonaría bastante extraño. El uso de “su” significa posesión. Así que esto implicaría, de alguna manera, que el gusano ya pertenecía al pájaro, y tal vez el gusano se escapó y el pájaro tuvo que atraparlo de nuevo. Esto es muy poco probable. Los gusanos no se mueven tan rápido. Son muy lentos.
El pájaro madrugador atrapa la mosca
Los proverbios son los que expresan la verdad de forma concisa con el uso de las palabras más adecuadas. Hay innumerables proverbios y todos hemos escuchado la mayoría de ellos. Pero lo que hace falta es entender el mensaje significativo que contienen. Un refrán muy conocido es “Al que madruga, Dios le ayuda”, que subraya la importancia del tiempo para alcanzar los objetivos. El hombre que se esfuerza por tener éxito es como un pájaro que sigue buscando su presa. Pero sólo el pájaro que llega antes que los demás recogerá el gusano, lo que significa que sólo quien valora el tiempo y llega antes puede prosperar. De todos los recursos de que dispone el hombre, el más valioso es el tiempo. El tiempo no es nada en sí mismo, pero es lo único que da valor a todo. La primera y principal cualidad que debemos poseer para alcanzar nuestro destino es ser puntuales. Los madrugadores nos enseñan el valor del tiempo a través de sus rutinas diarias. El tiempo, una vez perdido, no se puede comprar de nuevo a cualquier precio y ni siquiera se puede recuperar o recrear un solo segundo. El hombre es una mera mota de polvo, pero si el tiempo se utiliza con precisión nos hará extraordinarios. Debemos preparar nuestra mente y decirnos a nosotros mismos que debemos ser firmes para alcanzar nuestros objetivos.