PIB de la UE frente al de EE.UU.
La recuperación económica de la zona del euro y de la Unión Europea en su conjunto se encuentra ya en su tercer año. Debería continuar a un ritmo modesto el próximo año, a pesar de las condiciones más difíciles de la economía mundial.
En un contexto de descenso de los precios del petróleo, política monetaria acomodaticia y un valor externo del euro relativamente débil, la recuperación económica de este año ha sido resistente y generalizada en todos los Estados miembros. Sin embargo, ha seguido siendo lenta.
El impacto de los factores positivos se está desvaneciendo, al tiempo que aparecen nuevos retos, como la ralentización de las economías de mercado emergentes y del comercio mundial, y las persistentes tensiones geopolíticas. Respaldado por otros factores, como un mejor comportamiento del empleo que respalda la renta real disponible, la facilitación de las condiciones crediticias, los avances en el desapalancamiento financiero y el aumento de la inversión, se espera que el ritmo de crecimiento resista los desafíos en 2016 y 2017. En algunos países, el impacto positivo de las reformas estructurales también contribuirá a respaldar aún más el crecimiento.
PIB países europeos
Salario medio neto24.946€ anuales (2021)[11]Principales sectoresExterioresExportaciones7,102 billones de dólares (est. 2019)[12]Bienes de exportaciónmaquinaria, vehículos de motor, productos farmacéuticos y otros productos químicos, combustibles, aviones, plásticos, hierro y acero, pasta de madera y productos de papel, bebidas alcohólicas, mueblesPrincipales socios de exportación
Importaciones6.650 billones de dólares (est. 2019)[12]Bienes de importacióncombustibles y petróleo crudo, maquinaria, vehículos, productos farmacéuticos y otros productos químicos, piedras preciosas, textiles, aviones, plásticos, metales, barcosPrincipales socios de importación
Cuenta corriente161.600 millones de euros; 1,1% del PIB (2015)[16]Deuda externa bruta13,05 billones (est. 31 de diciembre de 2014)[12]Posición de inversión internacional neta -2.557,4 mil millones de euros; 17,5% del PIB (2015)[17]Finanzas públicasDeuda pública
La economía de la Unión Europea es la economía conjunta de los Estados miembros de la Unión Europea (UE). Es la tercera economía del mundo en términos nominales, después de Estados Unidos y China, y la tercera en términos de paridad de poder adquisitivo (PPA), después de China y Estados Unidos. Se calcula que el PIB de la Unión Europea será de unos 17,9 billones de dólares (nominales) en 2020,[24] lo que representa aproximadamente 1/6 de la economía mundial[25].
Previsión del PIB en Europa
El PIB a precios de compra es la suma del valor añadido bruto de todos los productores residentes en la economía más los impuestos sobre los productos y menos las subvenciones no incluidas en el valor de los productos. Se calcula sin hacer deducciones por la depreciación de los activos fabricados ni por el agotamiento y la degradación de los recursos naturales. Los datos se expresan en dólares estadounidenses corrientes. Las cifras del PIB en dólares se convierten a partir de las monedas nacionales utilizando los tipos de cambio oficiales de un año. Para unos pocos países en los que el tipo de cambio oficial no refleja el tipo aplicado efectivamente a las transacciones reales de divisas, se utiliza un factor de conversión alternativo.
PIB Europa Occidental
Tras un fuerte repunte en 2021, se prevé que el PIB real crezca un 2,6% en 2022 y un 1,6% en 2023. El crecimiento se verá significativamente frenado en el primer semestre de 2022 por la guerra en Ucrania y los cierres en China. Estos factores también están empujando la inflación al alza, hasta el 7% previsto para este año. Esto está pesando en el consumo de los hogares y aumentando la incertidumbre. Con el embargo de petróleo ruso a partir de 2023, que empuja los precios del petróleo al alza, se espera que el crecimiento siga siendo escaso en 2023, mientras que la inflación sólo disminuirá gradualmente. Los riesgos para la actividad económica siguen siendo a la baja: las graves interrupciones del suministro de energía, sobre todo de gas, afectarían al crecimiento en Europa y harían aumentar la inflación.