¿Cómo puede una empresa solicitar financiación?
El capital riesgo (VC) es una forma de financiación de capital privado que proporcionan las empresas o fondos de capital riesgo a las nuevas empresas, a las empresas en fase inicial y a las empresas emergentes que se ha considerado que tienen un alto potencial de crecimiento o que han demostrado un alto crecimiento (en términos de número de empleados, ingresos anuales, escala de operaciones, etc.). Las empresas o fondos de capital riesgo invierten en estas empresas en fase inicial a cambio de capital, o una participación en la propiedad.
Los inversores de capital riesgo asumen el riesgo de financiar empresas emergentes arriesgadas con la esperanza de que algunas de las empresas que apoyan lleguen a tener éxito. Dado que las startups se enfrentan a una gran incertidumbre,[1] las inversiones del capital riesgo tienen altas tasas de fracaso. Las start-ups suelen basarse en una tecnología o un modelo de negocio innovadores y suelen pertenecer a sectores de alta tecnología, como las tecnologías de la información (TI), las tecnologías limpias o la biotecnología.
Un diagrama de financiación que ilustra cómo se financian normalmente las empresas de nueva creación. En primer lugar, la nueva empresa busca “capital inicial” y financiación de “inversores ángeles” y aceleradores. A continuación, si la empresa puede sobrevivir en el “valle de la muerte” -el periodo en el que la empresa intenta desarrollarse con un presupuesto reducido-, puede buscar financiación de capital riesgo.
Financiación para las nuevas empresas
Supongamos que se seleccionan al azar 1.000 startups en fase inicial con sede en Estados Unidos. ¿Cuántas de ellas llegarían a conseguir una serie A? De las empresas que consiguen una serie A, ¿cuántas consiguen una serie B? Se podría seguir este proceso hasta que sólo quedaran unas pocas empresas.
Pero no basta con preguntarse cuál es la tasa de supervivencia de las empresas de una ronda a otra. La pregunta más importante es qué ocurre con las que no logran superar la recaudación de fondos. Sin duda, la mortalidad es un hecho de la vida de las empresas emergentes. Pero también hay razones más felices para no pasar a la siguiente ronda, como cuando las empresas salen de la carrera de la financiación mediante una adquisición o una oferta pública inicial. ¿Qué porcentaje de esas empresas encuentran una salida?
Hoy vamos a responder a estas preguntas con los datos de financiación de unas 15.600 empresas tecnológicas estadounidenses fundadas entre 2003 y 2013. En primer lugar, echemos un vistazo a la curva de supervivencia y a lo pronunciada que es la caída.
De nuestras hipotéticas 1.000 empresas emergentes que cierran con éxito una ronda de financiación previa a la serie A (por ejemplo, una ronda de financiación de semillas o de ángeles, una nota convertible o una ronda de crowdfunding de capital), esperaríamos que algo más de 400 de ellas llegaran a la serie A. En otras palabras, nuestro conjunto de datos sugiere que alrededor del 60% de las empresas que obtienen financiación previa a la serie A no llegan a la serie A o más allá.
Cómo puede una empresa obtener financiación
Nuestro enfoque encarna lo que somos: una comunidad de solucionadores que se reúnen de forma inesperada para obtener resultados sostenidos para las organizaciones, sus clientes, las partes interesadas y las comunidades, que tienen un impacto positivo y duradero en toda la cadena de valor.
La confianza nunca ha sido tan importante. Es el vínculo que conecta a su organización, su gente, sus clientes, sus partes interesadas y el mundo. Sabemos que la confianza no es algo que se pueda comprar de la estantería. Es algo que se gana con cada interacción, cada experiencia, cada relación y cada resultado obtenido.
Proporcionamos la máxima calidad a través de la integridad, una objetividad inquebrantable y una fuerte inversión en datos, herramientas, tecnología, productos y servicios. El resultado es un entorno en el que prosperan la agilidad, la coherencia y el conocimiento, y en el que nuestro personal puede ofrecer a los clientes la excelencia que esperan una y otra vez.
La nueva ecuación es un futuro dirigido por personas y potenciado por la tecnología. Para nosotros, las personas y la tecnología van de la mano. Se trata de cómo el ingenio humano se combina con la innovación tecnológica y la experiencia para ofrecer resultados más rápidos, más inteligentes y mejores, al tiempo que se genera confianza con las partes interesadas en toda la cadena de valor.
Fuentes de financiación
Divulgación publicitaria y editorialEmpezar un negocio es emocionante, pero hay una gran pregunta a la que hay que dar respuesta desde el principio: ¿cómo se va a financiar? La buena noticia es que hay muchas vías de financiación para los empresarios que necesitan dinero para empezar a funcionar. Lea esta guía en profundidad para saber cómo financiar una nueva empresa y, a continuación, explore sus opciones de financiación empresarial.
Existen múltiples formas de financiar un negocio y algunas pueden ser más adecuadas para sus necesidades que otras. Entender cómo funciona cada una de ellas y qué es lo bueno (o lo malo) de las diferentes opciones de financiación de empresas puede ayudarte a reducirlas. A continuación te presentamos un resumen de las ocho formas de financiar una nueva empresa:
La primera opción para financiar una empresa nueva es sacar dinero de tus ahorros personales, lo que se conoce como bootstrapping. En el lado positivo, iniciar un negocio con dinero en efectivo procedente de tus propios activos significa que no te endeudas desde el principio. Tener que hacer pagos mensuales a un prestamista podría ser difícil al principio si todavía estás trabajando para generar un flujo de caja positivo.