Vegetariano para el medio ambiente
El planeta nos necesita ahora más que nunca. El nivel del mar está subiendo y las temperaturas son cada vez más extremas. Las tormentas y las catástrofes son más graves y ocurren con más frecuencia. Y un número cada vez mayor de personas está sintiendo los efectos del cambio climático.
Gran parte de la población está dispuesta a ayudar como pueda. Muchos presionan para que se prohíban las pajitas y para que lleven sus propias bolsas de la compra al supermercado. Algunos se duchan menos y otros van al trabajo en bicicleta. Pero cada vez son más las investigaciones que relacionan la ganadería con un sinfín de problemas medioambientales. Y mucha gente está buscando una solución en sus platos.
En 2018, el análisis más exhaustivo del mundo sobre el efecto de la agricultura en el medio ambiente descubrió que una dieta vegana es la “mayor cosa” que un individuo puede hacer para disminuir su impacto en el planeta. Esta investigación, llevada a cabo por investigadores de la Universidad de Oxford, está motivando a la gente a cambiar sus hábitos alimenticios.
Impossible Foods, conocida por su hamburguesa Impossible, con carne de vacuno pero de origen vegetal, encargó a una empresa de investigación externa que encuestara a los ciudadanos de Estados Unidos sobre su opinión acerca de la carne vegana. La investigación reveló la mayor atención del público al medio ambiente, especialmente entre las generaciones más jóvenes.
Beneficios medioambientales de la dieta vegana
“Tú preguntaste” es una serie en la que expertos del Instituto de la Tierra responden a las preguntas de los lectores sobre ciencia y sostenibilidad. En honor a la Semana del Clima de Nueva York y a la iniciativa Covering Climate Now, nos centramos en tus preguntas sobre el cambio climático.
En cuanto al vegetarianismo o el hacerse vegano, es una decisión que definitivamente ayudaría al medio ambiente y al clima. Disminuirían las emisiones de CO2 y de metano y se reduciría el uso de fertilizantes y de agua. Sin embargo, puedes conseguir la mayoría de estos beneficios simplemente reduciendo tu consumo de carne de vacuno. Entiendo que la elección de los alimentos es una decisión personal y cultural. Lo que quiero decir es que reducir el consumo de carne de vacuno a la mitad, al 90%, o incluso por completo, son decisiones meditadas, científicamente informadas y buenas para el planeta que un individuo puede tomar.
Las cargas medioambientales relacionadas con nuestra dieta no son en absoluto minúsculas. Estas cargas incluyen el uso de casi la mitad de la tierra que se extiende por los Estados Unidos, al tiempo que se emite más del 70 por ciento de la escorrentía de nitrógeno que puede ahogar los ríos y arroyos. Para producir todos los alimentos que compramos habitualmente, el 40 por ciento del agua dulce del país se extrae continuamente de las reservas subterráneas. En total, la agricultura produce el 20 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero del país.
Vida vegetariana
Pero la información sobre qué alimentos son realmente “sostenibles”, “verdes” o “ecológicos” suele ser confusa, y a veces estos términos son directamente engañosos. Ahora que se venden productos, desde la carne de vacuno hasta la cerveza, con una etiqueta de “carbono neutro”, ¿cómo podemos asegurarnos de que lo que comemos es realmente sostenible?
El primer gran reto es saber sopesar los muchos factores que contribuyen a las emisiones de los alimentos. Por ejemplo, hay pruebas excelentes de que los alimentos de origen vegetal requieren menos energía (y producen menos emisiones) que los productos de origen animal. ¿Pero qué pasa si esos productos vegetales han recorrido medio mundo antes de llegar a tu mesa? ¿Y en qué medida los distintos métodos de cocción reducen o aumentan las emisiones de carbono?
Este experimento podría parecer un hecho, pero nuestra investigación arrojó algunas sorpresas. El papel de las millas aéreas, los métodos de cocción, el desperdicio de alimentos e incluso el impacto de comer fuera frente a comer en casa desempeñaron un papel importante. Algunos de nuestros hallazgos más reveladores proceden de la comparación de estos factores entre sí. Al final, el experimento también puso de manifiesto algunas de las formas más probadas de reducir el impacto climático de la comida.
Razones por las que el vegetarianismo es bueno para el medio ambiente
El cambio de la dieta de la carne y otros productos animales a la dieta basada en plantas tiene un alto potencial para reducir la huella de carbono y mitigar el cambio climático, así como para mejorar la salud humana, según el informe Cambio Climático 2022: Mitigación del Cambio Climático, del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas.
Los autores de Cambio Climático 2022 afirman que los estudios demuestran que un cambio hacia dietas basadas en plantas y ricas en legumbres, frutos secos, frutas y verduras podría conducir a una reducción sustancial de las emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con los patrones dietéticos actuales en la mayoría de los países industrializados. El informe señala que otros beneficios colaterales son la disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares y de diabetes de tipo 2, y la reducción de la mortalidad por enfermedades no transmisibles relacionadas con la dieta.
Un informe publicado en The Lancet en 2019 concluyó que un cambio en la dieta hacia los alimentos vegetales y lejos de los productos animales es vital para promover la salud de nuestro planeta. El informe afirma que las proyecciones para el futuro muestran que “las dietas veganas y vegetarianas se asociaron con las mayores reducciones de las emisiones de gases de efecto invernadero.”