¿Cuándo se crea el Comité de libertad sindical?

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Artículo 11. Todos los pueblos tienen el derecho de autodeterminación. En virtud de ese derecho determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo económico, social y cultural. 2. 2. Todos los pueblos pueden disponer libremente, para sus propios fines, de sus riquezas y recursos naturales, sin perjuicio de las obligaciones que derivan de la cooperación económica internacional, basada en el principio del beneficio recíproco, y del derecho internacional. En ningún caso podrá privarse a un pueblo de sus propios medios de subsistencia. 3. Los Estados Partes en el presente Pacto, incluso los que tienen la responsabilidad de administrar territorios no autónomos y en fideicomiso, promoverán el ejercicio del derecho de libre determinación, y respetarán este derecho de conformidad con las disposiciones de la Carta de las Naciones Unidas.

Artículo 5 Nada de lo dispuesto en el presente Pacto podrá interpretarse en el sentido de que confiere derecho alguno al Estado, a un grupo o a una persona, para emprender actividades o realizar actos tendientes a la supresión de cualquiera de los derechos y libertades reconocidos en el mismo o a su limitación en mayor grado que el previsto en el presente Pacto. 2. No se restringirá ni derogará ninguno de los derechos humanos fundamentales reconocidos o vigentes en los Estados Partes en el presente Pacto en virtud de leyes, convenios, reglamentos o costumbres, so pretexto de que el presente Pacto no los reconoce o los reconoce en menor grado.

Convenio de la OIT sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación 1948 nº 87

La libertad de asociación es un derecho humano fundamental garantizado por las principales normas internacionales de derechos humanos, como la Declaración Universal de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y los convenios de la OIT. La libertad de asociación es crucial para el funcionamiento de una democracia y es una condición esencial para el ejercicio de otros derechos humanos. En el contexto de los derechos humanos y las empresas, la libertad de asociación se entiende con mayor frecuencia como el derecho de los trabajadores “a afiliarse a organizaciones de su elección sin autorización previa” (Convenio 87 de la OIT), que es un derecho habilitante fundamental. Es un requisito previo para muchos otros derechos laborales básicos, ya que la capacidad de los trabajadores para organizarse les permite utilizar

su poder colectivo para lograr la mejora de los derechos laborales, la salud y la seguridad en el lugar de trabajo, el derecho a no ser discriminado y la ausencia de trabajo forzoso y trabajo infantil, entre otros muchos. El principio de la libertad de asociación está en el centro de los valores de la OIT: está consagrado en la Constitución de la OIT (1919), la Declaración de Filadelfia de la OIT (1944) y la Declaración de la OIT relativa a los principios y derechos fundamentales en el trabajo (1998). También es un derecho proclamado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), se ha incluido en una serie de iniciativas voluntarias como el Código de Base de la Iniciativa de Comercio Ético y está consagrado en el artículo 11 del Convenio Europeo de Derechos Humanos. En apoyo de este último, el Consejo de Europa señala que los Estados miembros deben adoptar las medidas adecuadas para garantizar que el derecho a la libertad de asociación pueda disfrutarse efectivamente sin discriminación por motivos de orientación sexual o identidad de género.

Cas ilo

El derecho de los trabajadores a la libertad de asociación es el derecho laboral fundamental. En el lugar de trabajo, el derecho a la libertad de asociación es esencialmente un derecho “habilitador” que permite a los trabajadores formar y unirse a organizaciones de trabajadores de su propia elección para promover intereses organizativos comunes. Para los trabajadores, la libertad de asociación es un medio para facilitar la realización de otros derechos, más que un derecho en sí mismo. Se considera el único derecho esencial para los trabajadores del que se derivan otros derechos y sin el cual los demás derechos son ilusorios. Por lo tanto, se denomina “expresión abreviada de un conjunto de derechos y libertades relacionados con la pertenencia a asociaciones de trabajadores y empresarios”.

Modelo de política de libertad de asociación

La libertad de asociación es un derecho humano fundamental proclamado en la Declaración Universal de Derechos Humanos. El artículo 18 de la Constitución sudafricana establece el derecho a asociarse y desasociarse libremente. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) considera que la libertad de asociación es uno de los cuatro principios laborales fundamentales y va más allá al clasificarlo como el principio laboral más importante.

El derecho de los trabajadores y empresarios a asociarse o desasociarse y a formar parte de organizaciones o estructuras representativas de su elección es parte integrante de una sociedad libre y abierta. Este derecho también está arraigado en la Constitución de la OIT y es un medio necesario a través del cual los empresarios, sus organizaciones y los sindicatos pueden establecer salarios y condiciones de trabajo justos y garantizar la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres.