Impuesto sobre la renta en Alemania
En la actualidad, las lenguas indoeuropeas con más hablantes son el inglés, el hindi-urdu, el español, el bengalí, el francés, el ruso, el portugués, el alemán, el persa y el punjabi, cada una con más de 100 millones de hablantes; muchas otras son pequeñas y están en peligro de extinción.
En total, el 46% de la población mundial (3.200 millones de personas) habla una lengua indoeuropea como primera lengua, el porcentaje más alto de todas las familias lingüísticas. Según una estimación de Ethnologue, hay unas 445 lenguas indoeuropeas vivas, de las cuales más de dos tercios (313) pertenecen a la rama indoiraní[1].
Durante el siglo XVI, los visitantes europeos del subcontinente indio empezaron a notar las similitudes entre las lenguas indoarias, iraníes y europeas. En 1583, el misionero jesuita inglés y estudioso del konkani Thomas Stephens escribió una carta desde Goa a su hermano (no publicada hasta el siglo XX)[4] en la que señalaba las similitudes entre las lenguas indias y el griego y el latín.
Otro relato fue el de Filippo Sassetti, un comerciante nacido en Florencia en 1540, que viajó al subcontinente indio. En 1585, señaló algunas similitudes entre las palabras sánscritas y las italianas (devaḥ/dio “Dios”, sarpaḥ/serpe “serpiente”, sapta/sette “siete”, aṣṭa/otto “ocho” y nava/nove “nueve”)[4].
Declaración de impuestos en alemán
Los precios de la electricidad en Alemania son de los más altos de Europa. Los altos costes se deben en parte al apoyo obligatorio a las fuentes de energía renovables, pero la mayoría de los clientes siguen apoyando la transición energética del país a pesar de ello. El precio medio de la electricidad al por mayor ha disminuido en los últimos años, pero los recargos, los impuestos y las tasas de la red aumentan la factura de los hogares y las pequeñas empresas alemanas. Sin embargo, los observadores del mercado afirman que los costes de la electricidad no suelen ser lo suficientemente elevados como para que los clientes busquen alternativas más baratas. Al mismo tiempo, la subida de los precios de la energía en 2021 en Europa está alterando los planes del gobierno para aliviar la carga financiera de los hogares mediante la reducción de las tasas y recargos sobre el consumo.
El precio medio de la energía para los hogares y las pequeñas empresas en Alemania se sitúa en 32,16 céntimos por kilovatio hora (ct/kWh) en 2021, según un análisis de la Asociación Alemana de Industrias de la Energía y el Agua (BDEW). Más de la mitad del precio se debía a componentes determinados políticamente, como impuestos, gravámenes y recargos.
Declaración de la renta en Alemania plazo 2022
Debido a las circunstancias provocadas por la pandemia de Corona, el plazo para la declaración de la renta de 2020 se ha ampliado hasta el 1 de noviembre de 2021 (o el 2 de noviembre para los estados federados que celebran una fiesta el 1 de noviembre).
Aquellos que presenten su declaración de impuestos de forma voluntaria pueden hacerlo hasta el 31 de diciembre, 4 años después del año fiscal. Por ejemplo, una declaración de la renta voluntaria de 2020 no debe presentarse hasta finales de 2024, así que hay tiempo de sobra, pero cuanto antes presente la declaración, antes sabrá cuál será su devolución de impuestos.
Si ha recibido prestaciones de sustitución del salario (Lohnersatzleistungen), como más de 410 euros en prestaciones laborales de corta duración (Kurzarbeitergeld), prestaciones de desempleo (Arbeitslosengeld) o prestaciones parentales/de maternidad (Eltern-/Mutterschaftsgeld) en 2020, está obligado a presentar una declaración de la renta. Este tipo de prestaciones están sujetas al llamado Progressionsvorbehalt, que puede suponer un aumento del tipo impositivo y un mayor pago de impuestos. Por suerte, podemos ofrecerte mucha información sobre los gastos deducibles que pueden ayudarte a reducir esa carga. ¡Hay más de los que cree!
Paquete de estímulo – deutsch
El subsidio familiar se paga a los hijos hasta que cumplen 16 años. El subsidio se paga a los hijos que continúan sus estudios hasta que terminan la escuela, o hasta el final del año escolar en el que cumplen 19 años. El año escolar comienza el 1 de septiembre y termina el 31 de agosto (en el último año de secundaria, el 30 de junio).
Ejemplo. Una familia tiene tres hijos: uno de 4 años, otro de 10 y otro de 17 que estudia en un instituto. La familia recibe 60 euros de ayuda por el primer y el segundo hijo, y 100 euros por el tercero, lo que hace un total de 220 euros.
Si nace un nuevo hijo en esa familia, ésta tendrá 4 hijos con derecho a la asignación por hijo. En ese caso, se pagará la prestación de 60 euros por el de 10 y 17 años, y la de 100 euros por el de 4 años y el recién nacido, lo que hace un total de 320 euros.
Si el joven de 17 años termina sus estudios, deja de tener derecho a la asignación por hijo y la familia pasa a cobrar la asignación por tres de sus hijos. En este caso, se pagarán 60 euros por el niño de 10 y 4 años, y 100 euros por el recién nacido, lo que hace un total de 220 euros.